domingo, 13 de noviembre de 2011

AMOR

Anda libre en el surco, bate el ala en el viento,
late vivo en el sol y se prende al pinar.
No te vale olvidarlo como al mal pensamiento:
¡lo tendrás que escuchar!

Habla lengua de bronce y habla lengua de ave,
ruegos tímidos, imperativos de amar.
No te vale ponerle gesto audaz, ceño grave:
¡lo tendrás que hospedar!

Gasta trazas de dueño; no le ablandan excusas.
Rasga vasos de flor, hiende el hondo glaciar.
No te vale decirle que albergarlo rehúsas:
¡lo tendrás que hospedar!

Tiene argucias sutiles en la réplica fina,
argumentos de sabio, pero en voz de mujer.
Ciencia humana te salva, menos ciencia divina:
¡le tendrás que creer!

Te echa venda de lino; tú la venda toleras;
te ofrece el brazo cálido, no le sabes huir.
Echa a andar, tú le sigues hechizada aunque vieras
¡que eso para en morir!

Besos


Hay besos que pronuncian por sí solos
la sentencia de amor condenatoria,
hay besos que se dan con la mirada
hay besos que se dan con la memoria.

Hay besos silenciosos, besos nobles
hay besos enigmáticos, sinceros
hay besos que se dan sólo las almas
hay besos por prohibidos, verdaderos.

Hay besos que calcinan y que hieren,
hay besos que arrebatan los sentidos,
hay besos misteriosos que han dejado
mil sueños errantes y perdidos.

Hay besos problemáticos que encierran
una clave que nadie ha descifrado,
hay besos que engendran la tragedia
cuantas rosas en broche han deshojado.

Hay besos perfumados, besos tibios
que palpitan en íntimos anhelos,
hay besos que en los labios dejan huellas
como un campo de sol entre dos hielos.

Hay besos que parecen azucenas
por sublimes, ingenuos y por puros,
hay besos traicioneros y cobardes,
hay besos maldecidos y perjuros.

Judas besa a Jesús y deja impresa
en su rostro de Dios, la felonía,
mientras la Magdalena con sus besos
fortifica piadosa su agonía.

Desde entonces en los besos palpita
el amor, la traición y los dolores,
en las bodas humanas se parecen
a la brisa que juega con las flores.

Hay besos que producen desvaríos
de amorosa pasión ardiente y loca,
tú los conoces bien son besos míos
inventados por mí, para tu boca.

Besos de llama que en rastro impreso
llevan los surcos de un amor vedado,
besos de tempestad, salvajes besos
que solo nuestros labios han probado.

¿Te acuerdas del primero...? Indefinible;
cubrió tu faz de cárdenos sonrojos
y en los espasmos de emoción terrible,
llenáronse de lágrimas tus ojos.

¿Te acuerdas que una tarde en loco exceso
te vi celoso imaginando agravios,
te suspendí en mis brazos... vibró un beso,
y qué viste después...? Sangre en mis labios.

Yo te enseñe a besar: los besos fríos
son de impasible corazón de roca,
yo te enseñé a besar con besos míos
inventados por mí, para tu boca.


miércoles, 26 de octubre de 2011

10 Aspectos a considerar para superar un Conflicto



conflicto
1. Mantente fresco cuando otros estén furiosos y pierdan la cabeza. Tienes el control sobre tus emociones, no lo pierdas. No se trata de no demostrar tu molestia, sino de hacerlo mesuradamente, sin después arrepentirte de una acción cometida en un momento de descontrol.
2. Recuerda que cada discusión tiene al menos tres puntos de vista: el tuyo, el del otro y los de terceros, los cuales probablemente están más cerca de la objetividad. Siendo más versátil y viendo las cosas desde la perspectiva de los demás enriquecerás tu propio punto de vista.
3. Espera a calmarte antes de hablar. Ten en cuenta que la relación es más importante que la discusión. Dale más relevancia a las personas que a las opiniones.
4. Trata a toda persona con la cual tengas contacto como si fuera un pariente rico, de quien esperas ser incluido en su testamento. Nunca te arrepientas de tratar muy bien a la gente. Es el mejor negocio en todos los sentidos.
5. Busca el lado positivo y agradable, aun de las situaciones más complicadas y dolorosas. Es una disciplina que te ayudará a pasar más fácilmente los momentos difíciles y a convertir los problemas en oportunidades.
6. Establece el hábito de hacer preguntas y, sobre todo, de escuchar las respuestas.  Pregunta antes de reaccionar. Algunas veces disparamos y después preguntamos. También preguntamos, pero escuchamos para contestar, y no para entender.
7. No hagas o digas nada que pueda herir o hacerle daño a otra persona. Aférrate al proverbio que dice que todo lo que uno haga, se devolverá. La gente no recuerda tanto lo que tú dices o haces, sino la intención con la que lo haces.
8. Sé consciente de la diferencia entre análisis amigable y crítica destructiva. Observa si el propósito de tus palabras es ayudar, desahogarte o hacer daño.
9. Ten presente que si toleras a los demás, ellos también serán pacientes contigo en los aspectos no muy gratos de tu personalidad.
10. Reconoce tus errores y acepta tus responsabilidades. No olvides que un conflicto bien manejado fortalece la relación, y te ayuda a aprender de las diferencias. El pensamiento positivo es una disciplina que, ejercitada con constancia, te dará el poder de cambiar tu entorno y, por consiguiente, tu vida.

miércoles, 24 de agosto de 2011

REFLEXIÓN

Si podéis funcionar como si no tuvierais problemas, ¡descubriréis que no tenéis ningún problema! Porque todos los problemas son ilusorios….. se cree en ellos, por eso están presentes.

domingo, 31 de julio de 2011

Honestidad

Honestidad significa que no hay contradicciones entre nuestros pensamientos, palabras o acciones. Somos honestos cuando no nos engañamos ni engañamos a nuestros semejantes.
Si queremos ser honestos, debemos empezar por enfrentar con valor nuestros defectos y buscar la manera de superarlos, corrigiendo cada vez que nos equivocamos y cumpliendo con nuestro deber en las labores grandes y pequeñas sin hacer distinción.
Dicen que Diógenes, filósofo griego. Caminaba por la ciudad de Atenas a la luz llevando una lámpara encendida y afirmando que buscaba un hombre honesto.
La persona honesta vive lo que predica y habla lo que piensa, es coherente con lo que dice, hace y piensa.
La honestidad consiste en decir toda la verdad a quien corresponde, de modo oportuno y en el lugar correspondiente.
Decir la verdad no implica ser irrespetuoso con nadie. La persona que miente se hace un daño a sí misma.
Ser honesto es ser transparente; es necesario desprenderse de las máscaras que el ser humano se pone para defenderse, para ocultar sus inseguridades o miedos. El recelo y la agresividad, son algunas de estas máscaras.
Una persona deshonesta aparenta lo que no es, por ejemplo, aparenta virtudes que no tiene.
Una persona honesta no se preocupa por lo que los demás piensen de ella, vive en paz.
Una persona honesta no justifica o excusa sus actos, medita sobre ellos para corregir sus errores.

Extraído del Periódico Infantil “El Baúl de Jacinto.

Mi amigo y yo

Tal vez el titulo de este ARTICULO es irónico, para muchos y muy adecuado para otros, pero literalmente voy a convérsales con respecto a un gran amigo, que me acompaño la mayor parte de mi vida, desde que tengo uso de razón, ha estado junto a mí en todos mis momentos, buenos y malos, sin faltar uno y me ha dado la posibilidad de experimentar un sin fin de sentimientos que Yo misma no sabía que tenia.
Aún cuando, no tiene cuerpo físico, su presencia en mi vida a sido tan determinante, que no puedo ni imaginar, que rumbo habría tenido mi vida de no haberlo conocido. Les estoy hablando del MIEDO.
Muchas personas se resisten a aceptar que lo sienten y tal vez ese sea el error más grave, el no reconocerlo lo fortalece, no se puede vencer a un enemigo que no se conoce que existe. Sin embargo para todos aquellos que si lo reconocemos, la batalla aún es cuesta arriba para superarlo, pero SI SE PUEDE.
A los 9 años tuve mi primer encuentro con el, mi madre, una mujer sin miedos, según ella, me pidió que revisara detrás de una silla, porque oía un ruido de un insecto que YO DEBIA ELIMINAR, todo aquello me aterro de tal manera que mis manos empezaron a sudar, el corazón se me salía por la boca y mis piernas temblaban de una forma que casi no podía controlar, sin embargo y por no decepcionar la tradición familiar de NO MIEDO, corrí la silla en cuestión y descubrí un animalito, más asustado que YO, pequeño, de un color verde claro, al cual no tuve corazón para matar y solo lo saque fuera de la casa.
Por años olvide esta experiencia, pero creo que me marco para toda la vida, ya que en están presente en ella todos los ingredientes del miedo, que me acompañaron a lo largo de mi vida.
Inicialmente deberíamos definirlo, ¿Qué es el Miedo?, es una pregunta que aún me hago mientras escribo, muchos autores han definido este concepto y todas son respuesta validas y muy académicas; pero más alla de eso, creo que es importante que definas TU MIEDO, ¿Que es para Ti?, ¿Es algo que te ocurre o que creas?, ¿Es real o imaginario?. El miedo esta dentro de la categoría de las emociones, el Dr. W. Dyer, lo describe como una Zona Errónea, razón por la cual pudiera pensarse que es un sentimiento negativo y de hecho para muchos lo es, incluso Yo mismo así lo creía.
Mi miedo es lo que me paraliza, a veces es como un tranquilizante, porque me impide meterme en problemas, pero a veces me lleva a abandonar mis ideas y detenerme ante mis metas. En el mundo de las finanzas donde me desempeño, eso es grave, ya que de la toma de decisiones desprovistas de miedo, depende el éxito de los negocios.
Aún así y a pesar de mi éxito, Yo continuaba teniendo miedo. Siendo así me empeñe en determinar que lo producía, ¿Una situación? ¿Una Persona?, tal vez un momento del mes, del año, etc. Durante mucho tiempo lo atribuí a una situación en particular, por ejemplo, si no tengo dinero, temo no pagar las cuentas, si mi pareja no esta conmigo temo que no me quiera, si no me caso a determinada edad no me casaré nunca y la lista sigue y es infinita. Después de mucho meditar y leer infinidad de libros y artículos sobre el tema, definí que mi miedo, venia de hecho de MI, yo lo producía, sin importar si la situación era agradable o desagradable, si estaba feliz, temía que se me acabará la felicidad, si estaba triste el temor era que las cosas se pusieran peor aún, a estas alturas esto se me estaba convirtiendo en terror.
Cuando estuve realmente consiente del efecto que esto tenía en mi vida, ya que las cosas empezaron ha salirme muy mal, debía lidiar con las consecuencias físicas de mi amigo en mi vida.
Soporté un sin fin de malas decisiones, malas parejas, malos trabajos y malas relaciones familiares antes de aterrizar en mi realidad: YO HABIA PRODUCIDO TODAS ESAS CONDICIONES EN MI VIDA.
Una vez que lo acepte, lo cual me tomo años, comencé a pensar como podía resolverlo, ¿Que podía hacer Yo para liberarme de eso? Las respuestas no vinieron de una vez, pero como dice el Dr. W: Dyer, me conecte con el propósito de mi vida y respiré. Sin ser poseedora de grandes verdades y en respeto a todos los maestros universales que han hablado de este tema, esta es mí formula:
  1. Reconoce que tienes MIEDO: Es tal vez lo más difícil, el reconocimiento es el paso # 1, una vez que lo reconoces, cierra tus ojos y medita en él, siéntelo, ¿Donde los sientes? ¿En el Estomago? ¿En las Piernas o como una sensación en todo el cuerpo? Cuando lo identifiques, disponte a bendecirlo así como lo oyes, bendícelo en el nombre de Jesús o de acuerdo a tu creencia religiosa y déjalo salir. Esto te libera, te calma y aún cuando no lo creas es un paso enorme.
  2. Busca la Causa: el segundo paso puede que te lleve mucho tiempo, o como a mí que me tomó 5 minutos, no importa, tómate tu tiempo y define esa causa o causas que pueden ser las culpables de todos esos efectos que te han perseguido por años. Por muchos años, pensé que la causa de mis miedos eran mis padres, mis parejas, mis compañeros de trabajo; todos menos Yo, ya que era más cómodo culpar a alguien más de esto o de aquello que estaba mal en mi vida. No caigas en esa trampa y reconoce la verdadera causa: la forma como tomas los acontecimientos en tu vida. Nadie te obliga a tomar decisiones, el libre albedrío es una realidad y no hay necesidad de culpar a nadie más por tus resultados negativos. Recuerda que cada causa tiene un efecto y estos estarán presentes a lo largo de tu vida, hasta que tu digas BASTA.
  3. Toma una DECISIÓN: Creo que este es otro punto álgido del proceso, muchos realizamos los dos pasos anteriores y nunca tomamos la decisión de cambiar, no sabemos si por mas MIEDO a lo desconocido o por siempre pereza mental, pero así sucede: Si nos imaginamos que somos una fuente de energía del universo, con todos los componente que hacen posible que el sol salga, una flor abra cada mañana y las aves vuelen, te darás cuenta que PUEDES HACER CUALQUIER COSA QUE TE PROPONGAS.
  4. Actúa: Escribe, mueve, habla, has ejercicio, busca tus respuestas, pero activa la corriente divina, aquella que nació contigo cuando fuiste concebido, la gota de Dios que hay en tu mente, la razón y el propósito por el cual estas aquí. Si es un trabajo, busca un trabajo que te satisfaga, si es una mejor relación de pareja, habla con tu pareja y dile lo que te molesta, aquello que anhelas tener y El o Ella no te dan, busca la forma de conectar tus acciones con tus deseos mas profundos.
  5. Incomódate: Todo cambio produce no solo un grado de resistencia, sino que te va a incomodar y debes estar dispuesto a pasar esas incomodidades. Lo que viene después solo va a ser satisfacción para ti. No hay forma de que algo negativo salga después de estos pasos. Así que disponte a pensar que por incómodo(a) que te sientas; vale la pena intentarlo si vas a disfrutar de una vida plena y acorde a tus expectativas.
  6. Mantente Firme: Has vivido con el miedo por mucho tiempo; para algunos es cuestión de 5 minutos liberarse de El para otros no, ten paciencia contigo mismo y disponte a esperar el tiempo que sea necesario para lograr tus metas.
  7. Convéncete de que puedes ser FELIZ: Tener una vida feliz, también da miedo y produce efectos en tu vida, cuando te llegue la felicidad no dudes de ella y disfrútala y finalmente DA GRACIAS en todo momento, por todas las cosas, incluso por que te conectaste con esta escritura y por el efecto que va a tener en tu vida.
Autor desconocido

jueves, 28 de julio de 2011

El Ratón Campesino y el Ratón Cortesano



Un ratón campesino tenía por amigo a otro de la corte, y lo invitó a que fuese a comer a la campiña. Mas como sólo podía ofrecerle trigo y yerbajos, el ratón cortesano le dijo:

- “¿ Sabes amigo, que llevas una vida de hormiga? En cambio yo poseo bienes en abundancia. Ven conmigo y a tu disposición los tendrás”.

Partieron ambos para la corte. Mostró el ratón ciudadano a su amigo trigo y legumbres, higos y queso, frutas y miel. Maravillado el ratón campesino, bendecía a su amigo de todo corazón y renegaba de su mala suerte. Dispuestos ya a darse un festín, un hombre abrió de pronto la puerta. Espantados por el ruido los dos ratones se lanzaron temerosos a los agujeros. Volvieron luego a buscar higos secos, pero otra persona incursionó en el lugar, y al verla, los dos amigos se precipitaron nuevamente en una rendija para esconderse.

Entonces el ratón de los campos, olvidándose de su hambre, suspiró y dijo al ratón cortesano:


- “Adiós amigo, veo que comes hasta hartarte y que estás muy satisfecho; pero es al precio de mil peligros y constantes temores. Yo, en cambio, soy un pobrete y vivo mordisqueando la cebada y el trigo, mas sin congojas ni temores hacia nadie”.

Es tu decisión escoger el disponer de ciertos lujos y ventajas que siempre van unido a congojas y zozobras, o vivir un poco más austeramente pero con más serenidad.
 

Fábula de Esopo